✍🏻 JURIC TÓRTOLA (@JuricTM) | La voz del Puchades
El VCF Mestalla ha cuajado una segunda vuelta más que meritoria, pero en las últimas semanas se ha ido desdibujando y dejando un sabor agridulce. El equipo de Miguel Ángel Angulo, que llegó a asomarse con fuerza a los puestos de promoción tras asegurar la permanencia e incluso a soñar con atacar el liderato, ha perdido impulso justo en el momento clave. No ha sido por fútbol, sino por una cierta falta de intensidad competitiva que empieza a repetirse con demasiada frecuencia.
Desde que el filial valencianista logró sellar su continuidad en la categoría, ha dado la sensación de haberse soltado el cinturón y estar ‘dejándose llevar’. La tensión, la exigencia, el carácter… han bajado un par de grados. Prueba de ello ha sido el irregular último mes y medio de competición que enfrió mucho el sueño del play-off… y heló el del ascenso directo. Y aunque los de Miguel Ángel Angulo se mantienen en la pelea, lo hacen más por los ‘tropiezos’ que han ido sufriendo los demás que por sus propios méritos recientes.
El pasado fin de semana se rompió una mala racha de tres jornadas consecutivas sin sumar de tres con una victoria, sí, pero no se disiparon las dudas, incluso podría decirse que se acrecentaron. La UE Cornellà, que se jugaba sus últimas cartas por la permanencia, logró empatar con nueve jugadores en el campo. Un toque de atención serio. El “Mestalleta” se confió, perdió intensidad y rozó el desastre. La sensación fue que el equipo se relajó en exceso, y con esa actitud, cualquier rival -por inferior que parezca- puede ponerte en apuros.

El míster lo dejó claro tras el partido. En una comparecencia con tono serio tras una larga charla en el vestuario, Miguel Ángel Angulo no escondió su malestar: “Cuando tú no estás concentrado y con la intensidad necesaria para afrontar un partido, cualquier rival es capaz de crearte problemas. Le he hecho saber a los chicos que esto no puede volver a pasar y que tenemos que salir con otra mentalidad y con otra energía porque si no salimos al 100%, cualquier equipo te puede ganar”.
Ahora vienen dos jornadas determinantes, ambas ante equipos que también buscan el mismo objetivo (CE Sabadell en el Antonio Puchades) e incluso uno todavía más ambicioso (UE Sant Andreu a domicilio). El VCF Mestalla depende de sí mismo, pero con condiciones: necesita al menos cuatro puntos de los seis que quedan para clasificarse sin esperar otros resultados ni carambolas paralelas. No suena imposible, pero tampoco fácil. Porque la realidad es que ni los rivales ni la dinámica del equipo ni la actitud mostrada últimamente invitan al optimismo.
La calidad existe. El camino está trazado. Y el play-off es un sueño posible. Pero si no hay un cambio inmediato en la mentalidad, si el filial valencianista no vuelve a competir con la seriedad y el pragmatismo con el que lo hizo pocas semanas atrás, la promoción seguirá siendo solo una ilusión… que se acabará esfumando por detalles que poco tienen que ver con el balón.
📸: Valencia CF.