Raúl Pérez sorprendió a propios y extraños cuando la semana pasada se anunciaba que dejaba de desempeñar sus labores de segundo entrenador en el Valencia CF Mestalla tras dos años y medio siendo la mano derecha de Miguel Ángel Angulo en el banquillo del filial valencianista. Ahora, el técnico hará las mismas funciones en Irún, cerca de casa, al haberse enrolado en el ambicioso proyecto del Real Unión en Primera Federación.
El míster cántabro se pasó por los micrófonos de “Factoría Paterna” para comentar, entre otras muchas cosas, su etapa como ayudante de Miguel Ángel Angulo en el banquillo del Antonio Puchades, logrando subir una categoría y disputando un play-off de ascenso en dos temporadas consecutivas, o la “polémica” que se ha generado tras su sorprendente marcha del VCF Mestalla en medio de esta complicada y convulsa temporada en la que el filial valencianista (por varias razones que el míster argumenta) está sumido de pleno en la pelea por no descender de categoría a Tercera Federación.
El motivo de su salida, pese a que ha podido parecer que ‘se ha tirado del barco’ a mitad de temporada, es sencillo: tras varios años lejos, quería volver a estar cerca de casa. La llamada del Real Unión de Irún ha precipitado una marcha que ya en verano estuvo encima de la mesa y cerca de producirse al creer que su etapa en el VCF Mestalla había finalizado. Raúl no considera que haya “dejado al equipo tirado porque mi rol en el equipo no era imprescindible” y afirma que hay gente en el club que “lo va a hacer igual o mejor que yo”.
Respecto a la temporada que está viviendo el filial, en la que los de Miguel Ángel Angulo están sufriendo en la zona baja, Raúl Pérez achaca las dificultades que están atravesando al ‘fin de ciclo’ que ha sufrido el VCF Mestalla. El cántabro afirma que el cuerpo técnico era consciente de lo que se avecinaba este año porque se tuvo que “empezar de cero porque prácticamente todo el bloque que llevaba tiempo jugando junto se va” e indica que, al igual que le ocurrió en su día a Óscar Fernández, esa adaptación a marchas forzadas está haciendo mella en una categoría tan exigente.
Pero no solo el cambio generacional ha condicionado la temporada del VCF Mestalla. Y es que según Raúl, la mala planificación desde arriba (que está saliendo bien pese a haber adelantado el proceso de algunos jugadores) ha acabado afectando a la plantilla del filial porque “el primer equipo al final no firma y jugadores que iban a estar con nosotros, suben”, lo que se ha acabado traduciendo en tener que trabajar bajo mínimos durante la semana y hacer malabares para completar las convocatorias porque el Pipo Baraja suele citar jugadores de Miguel Ángel Angulo a diario.
Además, Raúl cree que “hay plantilla para estar de mitad de tabla para arriba”, pero se ha precipitado la adaptación de la nueva generación a una exigente Segunda Federación en la que los de Angulo en ocasiones han merecido mejor premio, pero “empiezan los nervios al no sacar resultados…” y todo, sumado a las inoportunas lesiones, ha formado un cóctel que ha dejado tiritando a un VCF Mestalla que parece haber “reaccionado bien con las incorporaciones de César (Moreno) y de Pedro (Alemañ)” en invierno para intentar revertir la situación.
El técnico, por último, dice marcharse satisfecho y valora de forma enriquecedora su etapa en el filial valencianista, en la que amplió su palmarés de ‘hombre ascenso’ tras devolver al VCF Mestalla a Segunda Federación y disputó un play-off de ascenso que tuvo un final amargo. Pero, más allá de esos logros colectivos y de haber ayudado a debutar a varios jugadores con el primer equipo, Raúl Pérez afirma quedarse con “la suerte de estar en un club tan grande y en una de las mejores canteras de Europa” y “con el cariño y el respeto de los jugadores que hemos tenido”.
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📸: Valencia CF.