VICENT GANDIA | ARA MULTIMEDIA
La singularidad del rival del filial valencianista mañana sábado rompe con cualquier estereotipo del fútbol moderno en categoría nacional. Y es que una población como Atzeneta d’Albaida, que apenas supera los mil habitantes, puede presumir de tener un club que se va a codear con entidades con un peso social e histórico que desde siempre se han visto por la pequeña pantalla. Todo ello sin olvidar que hace unos pocos años el Atzeneta UE transitaba por categorías regionales, batiéndose el cobre incluso en superficies de tierra.
Nada hacía presagiar que la gloria les esperaba unos años más tarde. Por eso sus habitantes viven con ilusión un año histórico, que se une a la curiosidad de aficionados de las poblaciones vecinas como Ontinyent o Alcoi, a 10 y 15 minutos respectivamente si se utiliza coche. Una historia que está a escasas horas de empezar a vivir su punto más álgido pero que no esconde sus cimientos y su sustento: la empresa Ubesol.
Este imperio de productos de limpieza, cuyo principal cliente es Mercadona, tiene el campamento base en Atzeneta d’Albaida y es el responsable de aportar todo el músculo económico a una entidad que por sí sola sería una quimera llegar a las cotas que ha alcanzado hoy en día. Salvando las distancias, recuerda bastante al crecimiento del Villarreal, una ciudad con una densidad de población bastante por debajo que la gran mayoría de rivales, con un referente financiero fiable y serio, también en lo deportivo, y que ha acabado por situar en el mapa a una población bastante desconocida. En definitiva, el Atzeneta UE es un pequeño Villarreal en ciernes. Un modelo a seguir con lazos profesionales y de amistad.
A pesar de los éxitos deportivos en cadena y el buen hacer en los despachos, pues se paga bien y al día, ubicar Atzeneta era muy complicado para la otra parte del estado español. Una eventualidad que ha solucionado la figura de David Albelda. Todo un icono del valencianismo que se lanzó a los banquillos la temporada pasada apostando por un club difícil de localizar en el GPS deportivo nacional. Y el final, visto está, ya queda en los anales de la historia: ascenso a Segunda División B y a disfrutar del que se ha bautizado como el “Atzeneta de Albelda”.
Una historia de emociones para enmarcar, pero que cede el paso a la realidad, que no es otra que el arranque del ejercicio liguero. Con todos los condicionantes antes mencionados, el Atzeneta no llega como la cenicienta del subgrupo, más bien el contrario. Como ha demostrado en esta pretemporada, se ha confeccionado una plantilla competitiva que no renuncia a nada. Bien es cierto que en estas semanas de preparación estival el Atzeneta ha convivido con problemas en los últimos metros, pero la entrega de sus jugadores es indiscutible. De hecho, ha faltado pólvora, pero los jugadores han sido generosos con el esfuerzo y el compromiso. No hay nombres sino hombres, aunque algunos peloteros sean de sobra conocidos: Carlos Esteve, ex del Saguntino y del Cornellà; Alex Chico, Paco Aguza, Lolo Ivars y Javi Serra, ex del Castellón.
Mañana se levanta el telón ante el filial ché. Curiosamente, valencianistas y atzeneteros se vieron las caras en las instalaciones de Paterna en uno de los primeros amistosos, con triunfo para los de Óscar Fernández. Eso, en Valencia. Ahora toca en el Regit, un campo de dimensiones reducidas, entre montañas y que condiciona la forma de jugar a los equipos que vienen a rasear el cuero.
Todo preparado para que se inaugure una competición histórica para un Atzeneta que es y será lo que su patrocinador quiera que sea y hasta cuando lo considere conveniente. Mientras tanto a disfrutar.
📸: Atzeneta UE / Valencia C.F.